¿A qué nos referimos cuando hablamos de huella de carbono? 

 

La huella de carbono es una medida para expresar la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) emitidos al medio ambiente por parte de diversas actividades, especialmente aquellas relacionadas con la producción de diferentes tipos de bienes y servicios.

 

El protagonismo de la huella de carbono radica en que esta se encuentra formada de gases (dióxido de carbono, metano, óxido nitroso y otros compuestos químicos) que está comprobado que tienen efectos nocivos en la salud humana y en el medio ambiente. Tanto así, que está comprobado que estas emisiones son las principales causantes del calentamiento global. 

 

Ante esta situación: ¿Qué medidas deben tomar las empresas para reducir este tipo de emisiones?

 

1. Conocer, mediante técnicas de medición estandarizadas, los niveles exactos de emisiones, de manera de poder buscar una solución que permita reducirlas.

 

2. Optar por fuentes de energía limpia para sus procesos productivos. ¿Por ejemplo? Energía solar o eólica. Es cierto que utilizar este tipo de fuentes energéticas más limpias requiere costos económicos más altos, pero dada la situación actual de nuestro ecosistema, se hacen necesario este tipo de medidas. Otro aspecto importante dentro de este punto, es que los consumidores están cada vez más conscientes del cuidado del medio ambiente, por lo que tenderán a elegir empresas que utilicen técnicas más sustentables.

 

3. No solo a través de los procesos productivos se puede ayudar a disminuir la huella de carbono, sino también a la hora de despachar los productos a su destinatario. También ayudará a reducir la huella de carbono si se opta por vehículos que no requieren combustibles fósiles, como autos eléctricos o vehículos híbridos. Esto reduce la cantidad de CO2 emitida por motores de gasolina a combustión y disminuye el riesgo de contaminación.

 

4. Eliminar el desperdicio fruto de las actividades productivas también es fundamental para reducir la huella de carbono. Es decir, reducir el uso de elementos desechables y reciclar todos los productos plásticos o metálicos que sea posible. Cambiar a contenedores reutilizables también puede ayudar a reducir la acumulación de basura.

 

5. Esta responsabilidad con el medio ambiente también debe ser considerada por los productores agrícolas. ¿Por ejemplo?  A través de la rotación de cultivos, uso de abonos naturales y la restauración de suelos. 

 

6. Otros actores - quizás no directamente relacionados con la producción de bienes y servicios- son los relativos al mundo del almacenaje. Es cada vez más común ver cómo se construyen nuevos espacios destinados al almacenaje. Quizás sería importante que aquellos que deciden entrar en este tipo de negocios analizarán la opción de, en vez de construir, darle nueva vida a espacios ya existentes que pueden ser utilizados con ese fin. 

Es respecto a este último punto en donde nosotros como empresa de apoyo a las industrias de almacenaje y logística, tratamos de aportar con nuestro granito de arena. ¿Cómo? Los invitamos a seguir leyendo.

 

¿Cómo Kipp busca ayudar a reducir la huella de carbono? 

 

Para los que aún no nos conocen, uno de los principales objetivos de Kipp  es buscar espacios en desuso que puedan ser utilizados como bodegas o centros de almacenaje.Si bien nuestro negocio no consiste en brindar servicios de almacenaje como tal, como empresa también somos conscientes que al darle nueva vida a esos espacios en desuso, estamos ayudando a reducir la necesidad de construir nuevas edificaciones que presten el mismo servicio.Y, por ende, promover el menor uso de energía y de materiales de construcción.

 

En resumen: ¿Cómo busca contribuir Kipp a la disminución de la huella de carbono? 

 

1.Por  la vía de disponibilizar esos espacios en desuso como centros de almacenamiento o centros logísticos,  dándole un nuevo uso y con ello, promover un desarrollo urbano más responsable, evitando la intervención de barrios y construcción de nuevos centros de almacenamiento en forma innecesaria.

 

2.Reducir la huella de carbono de las empresas que deben distribuir bienes a la comunidad circundante de esos espacios, pues les permitimos implementar una estrategia de logística de última milla más eficiente.

 

En conclusión, la disminución de la huella de carbono debe ser un desafío para todas las empresas, ya que de esa manera estaremos protegiendo a nuestro medio ambiente.¿Cómo por ejemplo? A través de la reutilización de espacios ya existentes como centros de almacenamiento y bodegaje. 

 

¿Te gustaría saber más sobre nuestra oferta de espacios de almacenamiento disponibles? Visítanos en : https://kipp.storage/bodegas-en-arriendo

 

Elvira Barros
Elvira Barros
Content Manager

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